Me llamo Peio Etxarri y mi propósito cada vez que recito un poema es que cualquier persona capte la intención con la que fue escrito





Por aquel entonces tenía un programa cultural de radio y empecé a entrevistar a diferentes poetas. Claro, me tenía que leer sus libros, y así es como me inicié en este género literario.
Luego empecé a ir a recitales y me hice varios amigos poetas. Nos íbamos juntos de poteo y así empezó una bonita amistad. Un día me propusieron que fuera el que diera paso a las presentaciones en el recital y fue así como creamos el “Cuarteto de barra”. También fue ahí donde empecé a recitar poemas.
Enseguida me di cuenta de que la gente se divertía mucho con mis intervenciones. Y también me sorprendí a mí mismo viendo que recitar me hacía feliz y me llenaba.
Es entonces cuando mi cerebro hizo clic y pensé en crear un espectáculo que conectara la poesía con el humor. Y así es como se empezó a gestar Poesicilina, mi primer proyecto en solitario en el que se mezcla el teatro con el género poético.
Gracias a LaPiel Producciones Poesicilina es el espectáculo que es hoy. Xabier Flamarique y Jaione Urtasun se encargaron de guionizar una función que en sus inicios era prácticamente 100% improvisada.
Crearon los diferentes personajes de la obra después de muchas horas de conversación en las que les conté toda mi vida. Cada personaje corresponde a una etapa de la vida por la que puede haber atravesado cualquier persona. El estreno de mi primera función fue el 17 de marzo de 2018.
En la actualidad estoy probando otros formatos de recital poético para que sean accesibles desde Internet.
Durante el confinamiento se me ocurrió publicar a través del facebook de Poesicilina un video diario en el que recitaba poemas de diferentes artistas, muchos de ellos bajo petición de amigos y seguidores.
Esta experiencia resultó muy gratificante e hizo que me diera cuenta de que muchas personas se estaban enganchando a su dosis de Poesicilina diaria.
